Sylvia Plath, from The Unabridged Journals
Más de una vez creí ser causante de tus versos, de la poesía que emana de tu ser.
Tontamente me creí musa.
Tontamente me creí inspiración, cuando realmente no era ni el fantasma de una ilusión.
-Papittafritta
You were such a great joy to me that it almost seems like our time together was a lie. It’s as if I dreamed it. It’s like a dream and not like an actual lived experience.
Gabriela Mistral, tr. by Velma García-Gorena, from Gabriela Mistral’s Letters to Doris Dana; “February 22, 1949”
“La incertidumbre controla mi mente.”
Milky Chance - Stolen Dance
“El derecho de tenerla conmigo, de mirarla dormir, de penetrar en ella, de verla sonreír, de llamarla, de ser llamado, de tender mi mano en mitad del sueño y saberla ahí, de ver sus ojos, por Dios, cómo podré vivir sin ver sus ojos, pero también, cómo podría vivir viendo sus ojos y no tenerlos, no poder tildarlos al hacer un inventario de lo que es mío.”
— Mario Benedetti. Gracias por el fuego.
Puede que me quisiera, vaya uno a saberlo... pero lo cierto es que tenía una habilidad especial para herirme.
Mario Benedetti.
“Somos fuertes cuando estamos con otra alma. Cuando estamos unidos a los demás, no nos pueden romper.”
— Mujeres que corren con los lobos, Clarissa Pinkola Estés.
…No me canso nunca de transmigrar.
Desde el amanecer, me instalo en algún eucalipto a respirar la brisa de la mañana. Duermo una siesta mineral, dentro de la primera piedra que hallo en mi camino, y antes de anochecer ya estoy pensando la noche y las chimeneas con un espíritu de gato.
¡Qué delicia la de metamorfosearse en abejorro, la de sorber el polen de las rosas! ¡Qué voluptuosidad la de ser tierra, la de sentirse penetrado de tubérculos, de raíces, de una vida latente que nos fecunda… y nos hace cosquillas!
(…) A mí me gusta meterme en las vidas ajenas, vivir todas sus secreciones, todas sus esperanzas, sus buenos y sus malos humores.
Por eso a mí me gusta rumiar la pampa y el crepúsculo personificado en una vaca, sentir la gravitación y los ramajes con un cerebro de nuez o de castaña, arrodillarme en pleno campo, para cantarle con una voz de sapo a las estrellas.
¡Ah, el encanto de haber sido camello, zanahoria, manzana, y la satisfacción de comprender, a fondo, la pereza de los remansos…. y de los camaleones!…
(…) Cuando la vida es demasiado humana —¡únicamente humana!— el mecanismo de pensar ¿no resulta una enfermedad más larga y más aburrida que cualquier otra?
Yo, al menos, tengo la certidumbre que no hubiera podido soportarla sin esa aptitud de evasión, que me permite trasladarme adonde yo no estoy: ser hormiga, jirafa, poner un huevo, y lo que es más importante aún, encontrarme conmigo mismo en el momento en que me había olvidado, casi completamente, de mi propia existencia.
Extraído de “Espantapájaros” (1932) Oliverio Girondo
Es cierto que uno tiene que aprender a fluir, pero también tiene que aprender a ser consciente de la dirección de su fluir.
Soledad Amena
A tu lado sentía que mi cuerpo tenía alma.
Luux