Where your favorite blogs come alive
All Might había llegado hasta la entrada de U.A, ocasionando un gran estruendo, además de desastre, junto con un enorme destrozo en el pavimento. Había estado saltando de forma efusiva e imparable, desde edificios al suelo y de vuelta a las alturas. Provocando fuertes ventiscas que empujaban a las personas cercanas y movían los autos y demás vehículos cercanos a él. Estaba furioso, pero más que nada preocupado. Necesitaba ver a su discípulo, estaba preocupado y muy asustado, necesitaba saber que estaba bien. Pero, no más llegar con todo ese estruendo, piedras alzadas al aire y niebla queriendo taparlo, fue frenado por un muy serio Aizawa y un silencioso Nezu. Sus pesados, furiosos y asustado pasos, provocados por no saber exactamente en que estado se encontraba el pequeño Izuku, a quien él le tenía mucho afecto, fueron frenados por unas simples palabras. Su vista se apartó de la enorme entrada y el camino detrás de ella, hacía uno de sus costados, donde se encontraban dos personas esperándolo. - Él está bien. Esas palabras sonaban muy pesadas y verdaderas, considerando su enorme ansiedad y sabiendo de antemano que Eraser no era una persona de bromas, ni mucho menos en momentos como ese, supo de quién se trataba sin necesidad de preguntar, más eso no impidió que observara de nuevo la entrada de forma ansiosa queriendo confirmar lo que le decían, negándose a ello y ateniéndose a lo que su colega le afirmaba, sin desistir de apretar sus puños y suspirar. Puesto que no le impediría verlo a menos de que fuera muy urgente.