Recordar.
Un
Paseo
Si el silencio habla...
Es muy conocida la frase psudo psicologica de que el el silencio dice algo/enuncia cosas. Pero hoy comprendi de que habla. habla de que tus acciones , las mias dicen algo. Amenudo muy contradictoriamente sentimos que todo lo tenemos que enunciar , postear o compartir y no supera mas que la potencia del deseo. Muchas veces lo que es a su vez no es.
Si el silencio habla es atraves de tus acciones.
Vendo ojos achinados de siesta...
Lo efimero.
Nunca hablamos de lo que sentíamos ni de que tan enamorados estábamos tan solo hablamos de pasarla bien y eso en su momento fue hermoso.
Selecciones Literarias
Cómo flechas y Edades!
Envejecer es como un atardecer lento El cuerpo aprende a moverse al ritmo del sol que se oculta, más despacio, más pausado. Te despides del amanecer brillante que fuiste y saludas al crepúsculo que ahora eres.
Cumplir años es como contemplar un río que cambia su curso. El rostro se convierte en un mapa de caminos recorridos, y el cuerpo, en un árbol que abraza sus raíces profundas. Te despojas de hojas innecesarias: las vergüenzas, los prejuicios, y el miedo al invierno que traen los años.
Dejas que el viento lleve lo que debe partir, y que permanezca solo aquello que tiene raíces fuertes.
No, no es sencillo bailar con el tiempo. Es como aprender a caminar bajo una lluvia solitaria, sin paraguas, sin compañía, y enfrentarte al reflejo en el charco que te devuelve un rostro que apenas reconoces.
Aceptas que la primavera no es eterna, que las flores se marchitan, y que todo, incluso la vida, se convierte algún día en polvo que el viento abraza.
Pero en las lágrimas que caen, como gotas de lluvia, se riega la tierra. Y de esa tierra seca, brotan sonrisas nuevas como capullos. Nacen ilusiones como estrellas en la noche, y los anhelos, como aves, alzan vuelo al horizonte.
Envejecer no es fácil, pero es, al final, el arte de florecer en otoño.
Nunca asumas que lo tienes todo ganado. Lucha por ello todos los días.
Se supone que tu pareja es tu espacio seguro, no otra batalla en tu vida.
Y tus manos ...