“Conozcamos primero, antes de que lanzarnos a la aventura de amar desenfrenadamente. Que amar no significa perder los sesos, ni tampoco dejarse maltratar. Amar parece ser solamente un estado de estar desatento de la gris atadura de existir en una realidad dependiente.”
— Firthunands
Quisiera poder dormir, pero por las noches es cuando mi mente más suele pensar.
El sexo es el juego más simple que existe, para ser razonables, es el más sencillo. La metes y la sacas, lo sacas y lo metes, sube y baja, baja y sube, media vuelta y otra vuelta, no hay árbitro, aficionados echando porras (a menos que sea una despedida de soltero), no hay marcador, puntos, pero siempre, y por decisión de ambos, en la mayoría de los casos, se llega a tiempo extra. Otra de las ventajas del juego es que no necesita uniformes, cascos (bueno, de vez en cuando de látex), zapatos especiales o señalamientos. Es el único juego donde nadie gana, a no ser que uno de los dos terminé muy pronto y no esté dispuesto a ayudar a su contrincante a empatar. Luego de practicarlo un tiempo muchos tienen la idea de que para hacerlo más interesante hay que ir poniendo reglas, como:
¿Nos vemos antes para salir a cenar?
¿Pasas por mí después del trabajo?
Llevar un detalle antes del encuentro
Comenzar a contar intimidades
Hablar de planes a futuro
Prometerse amor para no sentirse tan insensibles
Comparar virtudes inventadas con otros competidores para demostrar quién tiene el mejor juego
Y cuando un juego se llena de reglas, se vuelve un sistema, y lo sabemos, todos andamos huyendo de los sistemas.
El libro tinto para charlar con el que no vino, Quetzal Noah
Una cita con lucifer
Hoy vendi mi alma al diablo, completa sin devoluciones
necesitaba lo que me ofrecio y la vendi
la cambie por una joya impagable
por una nube dorada, la cambie por casi nada
En mi soledad intensa la idea me inundo
una vil bofetada sin merecerlo motivó la cita
una pequeña figura, dos velas y un ruego maligno
era todo lo que necesité y apareció por fín
Solo me pidio que aceptara la condena que me espera
no desfigure mi rostro y con una sonrisa plena acepte
mi locura siempre vence en estos casos
pues es mejor negocio tener lo que uno desea.
Le entregué tu fotografía para que pudiera conocerte
el me dijo: -Ya la tengo, pues te leo la mente.
su carcajada implacable inundo la habitación
se fue mirando al cielo musitando: -este es solo mío!!
Pues asi fue, le entregue un cheque en blanco
en este caso al portador, para el caso angel negro
mi vida a una futura condena esta apostada
mas rio orgulloso por la paga y digo
No hay mejor negocio conocido que mi alma
A cambio de una simple y sencilla vida contigo.
Art by Aenniyam
¿Quién te nubló tanto? Que ahora llueves tan fácilmente.
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¿Por qué tengo que dañar a las personas que me están arreglando?
Una vez te pregunté si preferías las palabras escritas o las palabras dichas Dijiste que te daba igual Qué son palabras Pero que te importaba si eran dichas de forma pura o real.
Nunca te lo dije, pero… Creo que las palabras dichas, son la clase de palabras que se lleva el viento si no están escritas. Creo que las palabras escritas valen más, por que las estás escribiendo de forma meticulosa ya sea para alguien más o para ti mismo. Además de que es más difícil identificar si las palabras dichas son reales o solo son un engaño. Y la razón del por qué te pregunté eso… Fue por qué quería darme una idea acerca de cuanto apreciabas mis escritos Lo que yo te dedicaba. Lo que yo te escribía. Sé que no era tu intención… Pero me decepcionó tu respuesta. Y de alguna forma me hirió. Nunca leerás esto Lo sé… Bueno ahora sé que tengo que dejar de levantar tanto mis espectativas.